Los
diputados de diversas bancadas en la Asamblea
Nacional (AN) destacaron que la recién aprobada Ley de Medicamentos, contenida en el Proyecto 1007, representa un hito significativo y una de las mayores
inversiones en el sistema de salud de Panamá.
La votación favorable del pleno legislativo, con 45 votos a favor, marca el
inicio de un cambio importante en la regulación de medicamentos y productos
de salud, así como en los procesos de adquisición pública de estos insumos.
Tras
la firma en la presidencia del Legislativo,
el extenso documento ahora espera la sanción del Ejecutivo, consolidando una respuesta a una histórica demanda
ciudadana. Este proyecto surge como una respuesta conjunta de ambos poderes del
Estado después del veto al Proyecto 841, marcando así una nueva
iniciativa que busca modernizar los procesos regulatorios y aprovechar
herramientas tecnológicas para optimizar la adquisición de productos de salud
sin comprometer la calidad.
El
Proyecto 1007, compuesto por más de 200 artículos, aborda la problemática del
desabastecimiento de medicamentos y la necesidad de hacerlos accesibles en
términos de costos para la población. La nueva legislación fortalece mecanismos
para fomentar una mayor competencia en el mercado, siguiendo las prácticas de
países con autoridades regulatorias de alto estándar y organismos
internacionales de referencia.
Entre
las disposiciones clave de la nueva ley se destaca la creación de un Observatorio de Medicamentos, inspirado
en modelos exitosos de otros países. Este instrumento busca proporcionar una
visión integral del mercado de medicamentos, permitiendo una toma de decisiones
más informada y contribuyendo a la eliminación del desabastecimiento.
Además,
se implementa un capítulo específico dedicado a la adquisición pública de
medicamentos, junto con el establecimiento y desarrollo del Plan Nacional de Garantía de Abastecimiento
de Medicamentos. Estos elementos apuntan a abordar de manera efectiva la
problemática del desabastecimiento y garantizar un suministro adecuado de
medicamentos esenciales.
El
documento también prevé la creación de una red de laboratorios de apoyo,
agilizando los procesos de análisis y respondiendo al aumento de la demanda.
Para facilitar el acceso a la información, se fomenta el desarrollo de
plataformas, aplicaciones y herramientas tecnológicas que permitan a los
consumidores acceder directamente a fuentes de información confiables.
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La
nueva ley también contempla modificaciones a la Ley 24 de 1963, que crea el Colegio Nacional de Farmacéuticos y
reglamenta los establecimientos farmacéuticos. Específicamente, el artículo 8
se ajusta para eliminar barreras legales que restringen la participación de más
oferentes en el mercado nacional, promoviendo así la libre concurrencia y una mayor
competencia en el sector.
