EL IMPOSTERGABLE RETORNO A CLASES PRESENCIALES EN EL PERIODO ESCOLAR 2022.
Por: Leonel Iván Contreras Vega
El autor es Profesor de Inglés con más de 20 años de experiencia y Abogado.
Mucho se habla de la poca efectividad de las clases sincrónicas y asincrónicas desde que iniciaron en el 2020 en las escuelas oficiales a causa de la pandemia COVID-19 y al parecer, la solución a esta poca efectividad, es el retorno a las aulas de clases ya que según la opinión de padres de familia e incluso profesores, los estudiantes no están adquiriendo los esenciales mínimos en el proceso de formación. En otras palabras, los pupilos no están logrando un aprendizaje significativo, funcional y socio afectivo que les permita saber ser, saber hacer y saber convivir.
Hay quienes indican que el culpable de la poca efectividad del proceso formador se debe a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) utilizadas en todo el país durante el periodo de clases 2020 y 2021. Otros consideran que el fracaso de las TIC se debió a la inexperiencia de los profesores en el uso de algunas plataformas educativas, aunque hay que reconocer, que este problema fue rápidamente superado después de algunos cursos de capacitación.
Soy del criterio que muchos confunden a las TIC con un método de enseñanza de hecho, escuché muchos audios al principio de la pandemia en donde expresaban que los profesores no sabían su materia por desconocimiento de las plataformas, sin embargo; a pesar de ser un tema superado y que los docentes han hecho su mejor esfuerzo para que el proceso formador fuera efectivo a través de las diversas TIC, se insiste en creer que estas son un método más de enseñanza.
Quiero destacar que las TIC son una herramienta utilizada en el proceso formador para ayudar al estudiante a lograr un aprendizaje significativo. En otros términos, es un recurso que tiene los profesores y padres de familia con propósito pedagógico y andragógico.
Considero que, el fracaso de las clases sincrónicas y asincrónicas en las escuelas oficiales no se debe al inadecuado uso de las TIC, ni al desconocimiento de estas por parte de los profesores, sino; a cuatro factores que salieron a la luz en esta pandemia: el cultural, económico, la falta de métodos de estudios y la poca efectividad de parte de MEDUCA en solucionar la conectividad en lugares de difícil acceso.
En cuanto al factor cultural, podemos señalar que muchos padres de familia tienen una baja escolaridad para apoyar a sus hijos a nivel básico y general. En cuanto a lo económico, la pérdida de empleos hace difícil contratar y mantener un plan de internet en casa o pagar data que le permita conectarse a los estudiantes a las plataformas utilizadas para las clases sincrónicas y asincrónicas.
La falta de métodos de estudio es otro factor que ha afectado en demasía a los estudiantes ya que estudiar en casa por medio de TIC requiere de mucha dedicación disciplina y apoyo de los padres de familia y finalmente, el MEDUCA no logró hacer un acuerdo con el sector privado, en estos dos años, para solucionar la conectividad en las áreas de difícil acceso
En vista de todo lo señalado, la respuesta para solucionar el daño pedagógico ocasionados a los estudiantes en las escuelas oficiales, a raíz de esta pandemia, es el retorno a clases presenciales, sin embargo; existe una realidad que no podemos soslayar, la cual es; la falta de acondicionamiento de muchos planteles escolares para recibir a la población estudiantil. Dicho de otra manera, las escuelas han caído en franco deterioro y para corroborarlo solo hay que prestar atención a los noticieros o visitar los planteles escolares.
Resalto, en mayúscula cerrada, que le corresponde al MEDUCA solucionar los problemas básicos de estructura e infraestructura, conectividad en los planteles escolares a nivel nacional, agua, baños, material académico, personal de aseo, administrativo, seguridad y docente con carácter de urgencia si queremos reactivar las clases presenciales con efectividad en nuestros planteles en el año escolar 2022.
En definitiva, el retorno a las clases presenciales es impostergable, no obstante; regresar en las condiciones pre-pandemicas es un daño pedagógico de igual magnitud al que encaramos. Es necesario que las escuelas cuenten con una excelente conectividad entre otras TIC ya que no podemos ignorar de que estas llegaron para quedarse, además; los planteles escolares deben estar en perfectas condiciones de lo contrario se coartaría el derecho que tiene todo estudiante de una escuela oficial a recibir una educación de nivel a fin de que adquieran las competencias necesarias para ser productivo en la sociedad.
Dios bendiga a Panamá.
