Por Julia E. Alvear                                 Judicial- Deportiva, 23 de julio de 2019

Este vídeo nos recuerda los páramos que pasan los niños que integran el equipo de béisbol en Bethania,  cuando utilizan el  gimnasio Yuyín Luzcando.  Nadie sabe si aquí se forma el próximo Mariano Rivera, o un Irvin Saladino, pero las imágenes de este vídeo causa profunda tristeza.

Se registró la tarde de ayer, bajo la lluvia. Miren donde practican  el batear en una improvisada caja de bateo.  Los sueños de los niños tienen alas,  son como los de Mariano Rivera en sus humildes orígenes, llenos de alegría y ganas de jugar.

La infamia y sinvergüenzura son palabras que  no alcanzan para explicar porque desde octubre del 2016  bajo la promesa del ex director de Pandeportes, Mario Pérez se cerraron las instalaciones de este gimnasio con la falsa promesa que sería remodelado y mejorado junto al cuadro de bèisbol William R. Cook.

En Betania  muchos niños utilizan estas instalaciones  como alternativa para mantenerse  alejados de los  videojuegos, el celular, las malas influencias y las drogas.  Hay algunos aparatos para ejercitarse pero todo en malas condiciones y ya muy deteriorado.

Hoy las  remodelaciones  valoradas en un millón de dólares, que no están materializadas, porque el proyecto aprobado  se quedó sin recursos y partida presupuestaria, lo que llevó a la empresa contratista, el Consorcio Jardines en Gris, a abandonar la obra ante la falta de pagos.

En el Yuyin Luzcando los chicos tejen sueños aunque el piso sea de tierra y no haya ventilación.  Solo  se requiere un bate y la red vieja para parar las bolas que al mecer el bate,  llevan la energía, la pasión,  y la alegría que solo pueden sentir tan espontáneamente los  niños. 

Esto es para iniciar una investigación de oficio.